El presidente de la República, Juan Manuel Santos, aseguró este lunes, durante los Diálogos de Gestión en el Ministerio de Comercio, que se mantendrán las medidas de protección a la industria de confecciones y calzado.

Aunque la medida de extender el arancel a las importaciones de calzado y confecciones ya estaba casi lista, se oficializó luego de que se llegara a un acuerdo entre los comerciantes, las grandes superficies, los confeccionistas y la industria del calzado, pues algunos actores no estaban de acuerdo con ella.

La medida que rige actualmente, fija un arancel específico para todas las importaciones de calzado y confecciones de 5 dólares por kilo de confecciones o por par de calzado.

El ministro de Comercio, Industria y Turismo, Santiago Rojas, explicó que con los nuevos ajustes esto cambia. "Si es por debajo de 10 dólares la importación, en el caso de las confecciones, esa medida se mantiene pero por encima se flexibiliza para no castigar al legal”.

Respecto al calzado, Rojas señaló que “en la medida que se importe calzado por debajo de los 7 dólares va a mantener todavía la restricción a través de aranceles específicos para castigar a los importadores que quieran entrar productos subfacturados”.

El jefe de la cartera de comercio advirtió que “no se va a castigar al importador legal y formal que quiera hacer las importaciones a precios justos”, sino que se busca proteger a dichos sectores.

A la par, la viceministra de Comercio Exterior, Claudia Candela, aseguró que “los precios artificialmente bajos los vamos a seguir condenando con la medida que tenemos actualmente. Lo que logramos es que cada uno de ellos entendiera que teníamos que buscar una reducción de ese arancel específico para los rangos en que las importaciones eran formales y legales, para no afectar de manera desmedida y desproporcionada el comercio, dado que estamos en un país de libre comercio”.

En ese sentido, “todo el rango de las importaciones formales quedarían cobijados en los aranceles que contempla la Organización Mundial del Comercio que son los legales, y el otro rango quedaría condenado porque es conocido como subfacturación y como comercio desleal”, aseveró.

El presidente Santos explicó que con la medida inicial el Gobierno buscaba “proteger de la competencia desleal a los confeccionistas y la industria del calzado y ese arancel específico inmediatamente impactó de forma muy positiva la producción de los confeccionistas y del calzado porque impidió que esa competencia desleal a precios irrisorios, simple y llanamente no siguió llegando al país”.

El Primer Mandatario dijo que habían querido extender la medida pero “los comerciantes legales que compraban confecciones y textiles del exterior en forma legal, a unos precios reales, decían: 'a nosotros nos están perjudicando injustamente', y no se trataba de perjudicar a quienes hacen las cosas bien, por eso desde hace un año nos pusimos a tratar de llegar a unos acuerdos para que todo el mundo quedara contento, se ha hecho un gran esfuerzo”.

La Viceministra coincidió y dijo que "lo que nos propusimos es que entendieran que ellos no debían encontrarse en la discusión sino que el enemigo común era el contrabando y el comercio ilegal y que justamente tenían que trabajar en conjunto para buscar estrategias mucho más audaces”.

Candela resaltó el hecho de que se pudiera lograr una concertación en las cadenas de valor, y aseguró que “se vienen desafíos mucho más grandes, como buscar que haya más compras públicas de estos sectores, trabajando en conjunto, más compras entre ellos, más desarrollo de los proveedores, más emprendimiento y más innovación”.

Fuente: El colombiano.